Este libro contiene algunas ilustraciones de Jossot y dos breves ensayos. En pocas palabras se trata de una injuria contra el consumismo, la devastación productiva, el conformismo cultural y la moral del trabajo.
Los dos exaltados panfletos de Gustave-Henri Jossot que conforman este volumen, alegatos en favor del ocio y la improductividad, fueron publicados por primera vez, sin el menor éxito, en 1939 en París, en una edición costeada por el propio autor. Ambos constituyen la expresión de un estilo plástico y sanguíneo, con imágenes profusas, ofensivas y exasperadas, en la línea de las ilustraciones gráficas que el mismo Jossot desarrolló en las primeras décadas del siglo XX.
En «El evangelio de la pereza», la diatriba anarquista abre paso a una apasionada expresión mística y panteísta no menos exenta de iracundia. Así, con las tintas cargadas, uno y otro texto lanzan al ruedo ideas que aún mantienen su plena vigencia. «El feto recalcitrante» indaga en la naturaleza del oficio del caricaturista y el lugar que este ocupa dentro de un orden social alimentado por la incesante producción de necesidades, a cuya cabeza se yergue, in cuestionada, la presunta necesidad de trabajar.